3 cosas a tener en cuenta al hacer un envío de mensajería

Hemos hablado muchos sobre cómo hacer un envío de mensajería y todo lo que hay que tener en cuenta para que sea un envío correcto y que llegue adecuadamente a destino. Sin embargo dentro de todas esas cosas hay algunas más que hay que tener en cuenta que tienen que ver con el propio envío de mensajería.

• -Presupuestos: Como con cualquier otro tipo de elemento, es importante solicitar un presupuesto previo al envío. La empresa que se hará cargo del envío, para poder darte este presupuesto te va a solicitar algunos datos concretos como por ejemplo los códigos postales y la población a donde deseas hacer el envío, la cantidad de paquetes, el peso de cada paquete, qué contiene el interior y la medida del paquete en sí.

• -Tipo de transporte: Hemos comentado en más de una oportunidad los distintos servicios de mensajería que existen para el envío de un paquete. Por ejemplo, si se trata del envío de un paquete dentro de la misma ciudad, entonces hay que tener en cuenta el hecho de que puede ser un envío hecho al mismo momento, es decir que se recoge en el lugar y se lleva directamente al punto de destino. Cuando son envíos internacionales el envío puede ser por mar o aire, aunque en algunos casos puntuales se admite también el envío por tierra. En cuanto a los envíos marítimos se recomiendan cuando son realmente envíos grandes los que hace falta hacer a otro país ya que se suelen pagar por metros cúbicos.

Ten en cuenta además en todo ello, los horarios de recogida y los horarios de entrega ya que en muchos casos te dirán de entrega en 48 horas pero para que eso se haga efectivo, te solicitarán que se haga la recogida en un horario específico. Son datos que influyen y que pueden llegar a causar un desajuste.

• -Peso real frente peso tasable: Cuando hablamos del peso real es el número de kilos que realmente peso al envío. Sin embargo, en algunos casos se tiene en cuenta también la conversión de este según el volumen que va a ocupar en el medio de transporte. Por eso que hay que tener en cuenta que en muchas ocasiones el presupuesto no sólo va a depender del peso real sino también del volumen del mismo.